Esta semana, el mundo de la moda parisino no para de ofrecernos noticiones de lo mas morbosos. Si el despida de John Galliano por sus comentarios antisemitas, sus agresiones y las últimas noticias de ingreso en un centro de rehabilitación de Estados Unidos por sus múltiples adicciones nos han saturado de escándalo lo siguiente nos parecerá poco. La insuperable e inesperada aparición de Lady Gaga en en el desfile de Thierry Mugler, de la mano de Nicola Formichetti (estilista de Gaga y debutante al frente de la firma), han hecho que ningún medio que se precie se quede callado ante el acontecimiento, la firma y la semana de la moda parisina.
Esta semana, el mundo de la moda parisino no para de ofrecernos noticiones de lo mas morbosos. Si el despida de John Galliano por sus comentarios antisemitas, sus agresiones y las últimas noticias de ingreso en un centro de rehabilitación de Estados Unidos por sus múltiples adicciones nos han saturado de escándalo lo siguiente nos parecerá poco. La insuperable e inesperada aparición de Lady Gaga en en el desfile de Thierry Mugler, de la mano de Nicola Formichetti (estilista de Gaga y debutante al frente de la firma), han hecho que ningún medio que se precie se quede callado ante el acontecimiento, la firma y la semana de la moda parisina.
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